sábado, febrero 03, 2007

casino royale (1953, ian fleming)

Mi pueblo, no siendo muy grande, tiene, al menos que yo conozca, tres bingos. Sus nombres son lo de menos. Uno de ellos es, aparentemente, bastante modesto, o quizás sólo lo sea por su aspecto exterior. La verdad, nunca he entrado en ninguno. No es algo que me haya llamado la atención. Los otros dos, es sus fachadas, son más pomposos, más llamativos. Luces brillantes de neón, grandes carteles, cristaleras con cortinas, ... En mi inocencia de antaño, quizás por ese aura, siempre los consideré como lugares no recomendables (imagino que las películas de Andrés Pajares y Antonio Ozores, algo también tendrán que ver en eso). Bien, además uno está casi enfrente del otro. Lo cual, siempre he considerado algo perjudicial para el negocio. Creo que los tres, en algún momento, tuvieron servicio de aparcacoches, pero no estoy seguro de que presten ahora ese servicio (la alcaldesa de mi pueblo con la zona azul ha debido influir en ello).

Me estoy desviando de lo que quiero contar. El caso es que el otro día paseando, me encontré con que uno de ellos estaba cerrado. Bueno, quizás sea demasiado pronto para el negocio, pensé. Así que miré hacia la acera de enfrente y vi que la competencia estaba abierta, así que me temo lo peor. Ha cerrado un bingo de mi pueblo. Y si no me equivoco, el primero que se instaló. Supongo que la gente ya no se gasta el dinero esperando que los números unas bolitas, cantadas por una señorita, normalmente sin demasiada gracia, coincidan con los de un cartón que has comprado. Ahora hay medios mucho más sencillos para perder dinero o para ganarlo. A bote pronto, se me ocurren uno de cada: inversor en sellos y concejal de urbanismo en cualquier municipio. Hay que señalar también que el funcionamiento es un poco rudimentario: hay que tachar con un rotulador los número del cartón, si coinciden, con los cantados por la señorita de antes, que los lee de pelotas de ping-pong que se extraen una a una de un bombo y que llevan un número pintado en ellas. Lo dicho, hay sistemas más fáciles y rápidos para especular con el dinero. Quizás la ley anti-tabaco también ha influido en el cierre. No lo sé.


PD: Entiendo que al 22 se le llame "los dos patitos", pero .. ¿por qué el 15 es "la niña bonita"? ¿Tiene algo que ver con aquello que decíamos de niños de "el 6 y el 4, la cara de tu retrato"?

1 ingredientes:

Anónimo dijo...

UN EJEMPLO SIN DUDA DE "CISNES NEGROS"ESTA IDEA SE BASA EN EL HECHO DE QUE EL HOMBRE TIENE GRAVES DIFICULTADES PARA PREDECIR ACONTECIMIENTOS QUE SUCEDEN MUY EXTRAORDINARIA O MUY EXCEPCIONALMENTE,O QUE NO HAN OCURRIDO NUNCA ANTES(CISNES NEGROS).EN REALIDAD,SABEMOS MUCHO MENOS DE LO QUE CREEMOS SABER Y,POR TANTO,LA PREDICCION DEL FUTURO RESULTA COMPLEJA Y APASIONANTE.

| Top ↑ |